Desde la Astrosofía es posible unir dos tipos de cartas natales, la Sideral, que tiene que ver con la relación de los planetas con las constelaciones tal como están ubicadas hoy en día y, el Zodíaco que tiene una configuración con las Constelaciones que quedó plasmada con la configuración de las constelaciones desde sus inicios hace más de 3.000 años y seguirá así por toda esta era post Atlante. Ambas configuraciones no coinciden debido a la precesión de los Equinoxios de la Tierra, que la hace cambiar de Constelación cada 2.160 años.

En el inicio de la Astrología el sistema solar apuntaba a la Constelación de Aries, hoy apunta a la de Piscis y dentro de 150 años más comenzará a apuntar a Acuario.

Es así como desde la configuración Sideral podemos tener información de lo más cercano y real del mundo espiritual, ya que las energías que recibimos vienen de la combinación de las constelaciones y los planetas. energías que provienen de los seres espirituales que en ellas residen.

En el Zodíaco tenemos la información de lo que está más cerca de la Tierra misma donde encarnamos, más cercano a lo que vivenciamos realmente.

Ambas miradas se complementan para ayudarnos a vislumbrar nuestro camino en la Tierra.
Esta mirada es propia de la Astrosofía, que es la Astrología enriquecida y complementada por la Antroposofía a través de información entregada por Rudolf Steiner, Willi Sucher, Gunter Waschmut, Gisela Gorrinssen, entre otros antropósofos. La lectura desde este punto de vista es netamente personal del lector que la hace y por ende puede diferir con la lectura de otros astrólogos.